CUIDADOS DEL EMBARAZO

Cuidados durante el embarazo.

El embarazo es el proceso en el que un nuevo ser se desarrolla dentro de su madre, en el que la vida de dos personas trasciende y encuentra su síntesis en otra vida, un hijo que tras nueve meses de gestación, en los que irá formándose y desarrollándose, finalmente conocerá al mundo, especialmente a aquellas dos personas que le dieron vida: sus padres.

“Tomar la decisión de tener un hijo es trascendental.
Se trata de decidir que tu corazón caminará siempre fuera de tu cuerpo.”

Elisabeth Stone

Para vivir un embarazo saludable y que tu bebé nazca sin problemas o malformaciones,  hay ciertos cuidados que es necesario que lleves a  cabo antes y durante este período.

Recibir buen cuidado antes, durante y después de su embarazo es muy importante. Puede ayudar a su bebé a crecer y desarrollarse, y a mantenerlos a ambos saludables. Es la mejor manera de asegurar que su pequeño tenga un buen inicio para una vida saludable.

CUIDADO PRENATAL, CUIDA TU EMBARAZO

CUIDADOS DEL EMBARAZO

Un buen cuidado prenatal incluye una buena alimentación y buenos hábitos de salud antes y durante el embarazo. Idealmente, usted debe hablar con su proveedor de atención médica antes de empezar a intentar quedar embarazada. He aquí algunas cosas que deberá hacer:

Elegir a un proveedor: Será necesario que elija un proveedor para su embarazo y parto. Este proveedor le ofrecerá servicios de cuidado prenatal, de parto y de posparto.

Tomar ácido fólico: Si está contemplando quedar embarazada, o si ya lo está, debe tomar un suplemento con al menos 400 microgramos (0.4 mg) de ácido fólico todos los días. Tomar ácido fólico reducirá el riesgo de ciertos defectos congénitos. Las vitaminas prenatales casi siempre contienen más de 400 microgramos (0.4 mg) de ácido fólico por cápsula o tableta.

También debería:

  • Hablar con su proveedor sobre cualquier medicamento que tome. Esto incluye medicamentos de venta libre. Solo debe tomar los medicamentos que su proveedor considere que es seguro tomar mientras está embarazada.
  • Evitar todo uso de alcohol y el uso de drogas recreativas y limitar la cafeína.
  • Dejar de fumar, si lo hace actualmente.

Asistir a consultas y exámenes prenatales: Usted visitará muchas veces a su proveedor durante el embarazo para recibir cuidado prenatal. La cantidad de visitas y los tipos de exámenes que se le harán cambiarán según en qué punto de su embarazo se encuentre:

Hable con su proveedor sobre los distintos exámenes que se le practicarán durante el embarazo. Estos exámenes pueden ayudar a su proveedor a ver cómo se está desarrollando el bebé y a detectar cualquier problema con su embarazo. Los exámenes pueden incluir:

Cuidados antes del embarazo

Los cuidados antes del embarazo son tan importantes como los cuidados durante el embarazo, por eso, si ya tomaron la decisión de embarazarse, es importante que la familia y en especial tú como madre prepares tu cuerpo para vivir esta nueva etapa (3).

  • Revisa  tu estado emocional y físico (nutrición, vacunas, higiene personal)
  • Toma ácido fólico para prevenir malformaciones en el bebé al menos tres meses antes de embarazarte y los primeros dos meses del embarazo.
  • Aprende cómo prevenir enfermedades de transmisión sexual que pudieran afectar a tu bebé.

El embarazo y sus cuidados

Hay cuidados que es importante llevar a cabo durante todo el embarazo ya que tú y tu bebé vivirán muchos cambios a los que tendrán que adaptarse en poco tiempo (4).

Alimentación

Aliméntate sanamente, pues esta es una forma sencilla de cuidar tu salud y la de tu hijo durante el embarazo, además de evitar el sobrepeso o la mal nutrición. Recuerda, todos los alimentos que consumas en este periodo contribuirán a la formación, crecimiento y desarrollo del cerebro, la vista, el oído y todas las partes del cuerpo del bebé, así como para la formación adecuada de la placenta. Como verás en las siguientes recomendaciones, la clave de una buena alimentación se encuentra en la variedad y la calidad de los alimentos 

Visitas al doctor

  • Asiste a los controles prenatales para ver cómo progresa y crece tu bebé, además de recibir las vacunas  correspondientes. Generalmente durante un embarazo normal, las mujeres  asisten al médico al menos cinco veces. Durante tus consultas el médico hará pruebas para valorar tu estado de salud  y el de tu bebé (6).
  •  Toma sólo medicamentos recetados por tu doctor, pues muchos medicamentos pueden afectar a corto o largo plazo el desarrollo de tu bebé (7).

 Hábitos saludables

  • Mantén una buena higiene en tu persona, tu espacio y  en los alimentos que consumas para evitar enfermedades, conservar tu salud y la armonía en tu cuerpo y tu hogar (8).
  • Haz ejercicio moderado evitando fatigarte, mejorará tu  estado de ánimo y tu imagen, asegurará una ganancia de peso adecuada, te mantendrá relajada, disminuirá el estrés, dormirás mejor, incrementará tu resistencia y tono muscular para la labor de parto y te ayudará a  recuperarte con mayor rapidez del mismo. Puedes caminar, bailar, nadar o elegir otra actividad que te agrade, procurando que no sean actividades en las que puedas lastimarte.

Comer de forma saludable siempre es importante y especialmente durante el embarazo. Por lo tanto, asegúrese de que las calorías que ingiere proceden de alimentos nutritivos que contribuirán al crecimiento y desarrollo del bebé.

Intente seguir una dieta equilibrada que incorpore los siguientes alimentos:

  • carne magra
  • fruta
  • verdura
  • pan integral
  • productos lácteos de bajo contenido en grasas

Si sigue una dieta saludable y equilibrada, tendrá más probabilidades de obtener los nutrientes que necesita. Pero necesitará más nutrientes esenciales (sobre todo calcio, hierro y ácido fólico) que antes de quedarse embarazada. El profesional de la salud que supervise su embarazo le recetará vitaminas prenatales para estar seguro de que tanto usted como su bebé en proceso de crecimiento se están alimentando bien.

De todos modos, el hecho de tomar vitaminas prenatales no significa que usted pueda seguir una dieta desequilibrada. Es importante que recuerde que debe alimentarse bien durante el embarazo. Las vitaminas prenatales son suplementos para completar la dieta, no la única fuente de esos nutrientes tan necesarios.

Calcio

La mayoría de mujeres de diecinueve años en adelante –incluyendo las que están embarazadas- no suelen ingerir diariamente los 1.000 mg de calcio recomendados. Debido a que los requerimientos de calcio de un bebé en proceso de crecimiento son altos, usted debería aumentar el aporte de calcio para impedir que se le descalcifiquen los huesos. Probablemente el suplemento vitamínico prenatal que le recete el médico contendrá calcio.

Entre las fuentes ricas en calcio se incluyen:

  • los productos lácteos bajos en grasas, incluyendo la leche, el queso pasterizado y el yogur
  • los productos enriquecidos con calcio, como muchos los zumos de naranja comercializados, la leche de soja y los cereales
  • las verduras de hoja verde oscuro, como las espinacas, la col rizada y el brócoli
  • el tofu
  • las judías secas
  • las almendras

Hierro

Las mujeres embarazadas necesitan ingerir aproximadamente 30 mg de hierro cada día. ¿Por qué? Porque el hierro es necesario para fabricar hemoglobina, el componente de los glóbulos rojos encargado de transportar oxígeno. Los glóbulos rojos circulan por el cuerpo para transportar oxígeno a todas las células.

Si una persona no tiene suficiente hierro, su cuerpo no podrá fabricar suficientes glóbulos rojos y sus tejidos y órganos no recibirán el oxígeno que necesitan para funcionar correctamente. Por eso es especialmente importante que las mujeres embarazadas ingieran suficiente hierro a través de la dieta, tanto para su salud como para la de sus bebés es proceso de desarrollo.

A pesar de que este nutriente se puede encontrar en distintos tipos de alimentos, el hierro procedente de la carne se absorbe más fácilmente que el de origen vegetal. Entre los alimentos ricos en hierro se incluyen:

  • la carne roja
  • la volatería de carne oscura
  • el salmón
  • los huevos
  • el tofu
  • los cereales enriquecidos con hierro
  • las judías secas y los guisantes
  • las frutas deshidratadas
  • las verduras de hoja verde oscuro
  • la melaza negra

Ácido fólico

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés) recomiendan que todas las mujeres en edad de procrear –y sobre todo aquellas que quieran quedarse embarazadas- tomen un suplemento de 400 microgramos (0,4 mg) de ácido fólico cada día, aparte del ácido fólico ingerido a través de la dieta. Puede formar parte del suplemento multivitamínico prenatal o bien tomarse aparte

¿Por qué es tan importante el ácido fólico? Los estudios han mostrado que tomar suplementos de ácido fólico un mes antes de la concepción y durante los tres primeros meses de embarazo reduce el riesgo de que el bebé nazca con un defecto del tubo neural.

Fluidos

También es importante beber abundante líquido, sobre todo agua, durante el embarazo. El volumen sanguíneo de una mujer aumenta espectacularmente durante el embarazo, y beber suficiente agua cada día puede ayudarle a evitar problemas bastante habituales durante el embarazo, como la deshidratación y el estreñimiento.

Ejercicio

El Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. (DHHS, por sus siglas en inglés) recomienda por lo menos 150 minutos (es decir, dos horas y media) a la semana de actividad aeróbica de intensidad moderada a aquellas mujeres que no sean muy activas de por sí ni realicen actividades vigorosas. Si usted es muy activa o está acostumbrada a realizar actividades aeróbicas de intensidad elevada, tal vez pueda continuar con los entrenamientos, siempre y cuando su médico lo considere seguro. No obstante, antes de iniciar o continuar con cualquier programa de ejercicio físico, hable con su médico.

Está demostrado que hacer ejercicio durante el embarazo es muy beneficioso. El ejercicio regular puede ayudar a:

  • impedir una ganancia de peso excesiva
  • reducir los problemas asociados al embarazo, como el dolor de espalda, las piernas hinchadas y el estreñimiento
  • dormir mejor
  • aumentar la energía
  • mejorar el estado de ánimo
  • prepararse para el parto
  • reducir el tiempo de recuperación posparto

Las actividades de bajo impacto y moderada intensidad (como andar o nadar) son magníficas elecciones. El yoga o el método Pilates, así como los vídeos de gimnasia suave para embarazadas también son buenas opciones. Son actividades de bajo impacto y trabajan tanto la fuerza como la flexibilidad y la relajación.

En estado de embarazo es muy importante asistir periódicamente a los controles prenatales con el fin de identificar riesgos y prevenir futuras complicaciones que puedan presentarse. Invitamos a tener en cuenta las siguientes recomendaciones:


Alimentación:

El embarazo es una de las etapas de mayor cambio físico en la mujer. Las siguientes son las cantidades adicionales de nutrientes que debe consumir una mujer en estado de embarazo.

Recomendaciones generales:

  • Tener en cuenta que “comer bien” no significa, ni comer mucho, ni comer basándose en alimentos caros.
  • Consuma los alimentos despacio, masticando bien, en un ambiente relajado, tranquilo, evitando distracciones (TV, radio, celulares, etc.).
  • Se sugiere comer sentada a la mesa en compañía de su familia.
  • Exponga su piel al sol antes de las 10:00 a.m. y luego de las 3:00 p.m.
  • Mantenga una buena higiene bucal.
  • Consuma diariamente al menos cinco vasos de agua, en conjunto con las comidas.
  • Elija los siguientes métodos para cocinar: a la parrilla, al vapor, sudados o cocidos.
  • En lo posible consuma alimentos frescos y recién preparados.
  • Consuma al menos dos vasos de leche entera, kumis o yogurt, evite el consumo de leche cruda o no tratada; consuma una tajada de queso diaria.
  • Consuma al día por lo menos dos porciones de pescado, aves de corral, carne de res o cerdo magra sin gordos. Consuma por lo menos dos veces a la semana vísceras de res como bofe, hígado o pajarilla y acompáñelos de una fruta entera como guayaba, mandarina, naranja o papaya.
  • Consuma un huevo diario en cualquier preparación.
  • Incluya en su alimentación diaria frutas y verduras bien lavadas; prefiera el consumo de frutas enteras y no jugos.
  • Disminuya la cantidad de azúcar que añade a la leche, café, jugos de frutas, batidos, infusiones y a cualquier otro alimento.
  • Cuando presente náuseas es aconsejable una galleta de soda o un pan antes de levantarse, consumir seis comidas al día en lugar de tres y evitar en lo posible los olores fuertes.
  • Cuando presente estreñimiento aumente el consumo de agua, cereales integrales (productos de panadería integral o granola), frutas enteras (granadilla, naranja, mandarina, papaya, uvas, patilla o pitaya) y verduras crudas.
  • No consuma suplementos nutricionales o herbales que no hayan sido formulados por su médico; no consuma aguas saborizadas, gaseosas o bebidas energéticas.
Carrito de compra
0
    0
    Tu carrito
    Su Carrito está vacíoRegresar a compras
    Scroll al inicio